Ley de residuos contra el plástico: estos son los cambios que vienen
Reutilizar, reciclar y fortalecer una economía circular, más respetuosa con el medio ambiente: conoce los objetivos previstos de aquí a 2030 contra los plásticos de un solo uso.
La Ley de Residuos y Suelos Contaminados es un nuevo paso para actuar ante un problema cada vez más urgente: el aumento de plásticos de un solo uso, su acumulación y su impacto medioambiental. Según la ONU, la mitad de todo el plástico que se produce en el mundo está diseñado para utilizarse una sola vez y acabar en la basura. Para poner freno a este problema, la ley prevé una serie de acciones y cambios que tendrán lugar en esta década. Te contamos cuáles son los principales hitos de ese calendario y cuáles son las ventajas de la economía circular.
La ley de residuos establece unos objetivos muy ambiciosos con respecto al reciclaje. El principal cambio es la implantación de nuevas recogidas separadas. Los biorresiduos tendrán su cubo específico para 2022 en los municipios de más de 5.000 habitantes, y para 2024 en el resto. Además, los textiles, el aceite de cocina usado y los residuos domésticos peligrosos contarán con su propio contenedor antes de 2025.
La norma también establece objetivos más altos de reutilización y reciclaje de los residuos municipales. En 2025, deberá ser del 55 %; en 2030, del 60 %, y alcanzará el 65 % en 2035. De hecho, el margen de mejora en este aspecto es aún amplio, pues en 2017, en España se reciclaron el 46,1 % de los residuos municipales, en línea con la media europea (46,9 %). En este sentido, habrá una regulación para eliminar los residuos de una manera segura y someterlos a un tratamiento previo antes de su depósito en el vertedero.
Por último, este proyecto también propone sanciones para aquellos que atenten contra el medio ambiente, bien por la introducción de residuos a España desde otros países o para quienes los tiren en la naturaleza. Las multas parten de los 1.000 euros y pueden alcanzar los dos millones si se trata de residuos peligrosos.
Imagen: Eroski Consumer
El proyecto de ley de residuos también determina cuándo un residuo puede ser empleado de nuevo y establece dos categorías:
- Residuos que son, en realidad, un recurso para volver a fabricar el mismo producto. Un ejemplo sería el calcín, que se obtiene tras triturar los residuos del vidrio y se convierte en un nuevo producto para la industria.
- Residuos que se convierten en un subproducto (producto secundario derivado de procesos industriales), como es el caso de los residuos generados de la industria alimentaria que se emplean para la fabricación de piensos.
Ventajas de la economía circular
El Gobierno también ha aprobado la Estrategia Española de Economía Circular (EEEC), bautizada como “España Circular 2030”. Se trata de una hoja de ruta para repensar la economía, la sociedad y la relación con el medio ambiente de una forma integral. En definitiva, sienta las bases para transitar de un modelo lineal a uno circular.
- Lineal. Es el modelo actual. Se caracteriza por una dinámica de comprar, usar durante un tiempo escaso, en ocasiones incluso segundos, y tirar. Esto genera una gran cantidad de residuos y pone contra las cuerdas al planeta.
- Circular. Los recursos, los materiales y los productos se mantienen en la economía el mayor tiempo posible y se reducen los residuos al mínimo, aprovechando aquellos que no se pueden evitar. Este modelo permite extender la utilidad de los productos para dotarlos de una segunda vida y recuperar los materiales.
Fuente: https://www.consumer.es/medio-ambiente/ley-residuos-contra-plastico-cambios.html